Paul McCartney Cautiva a los Mexicanos con su «Got Back Tour» en el Estadio GNP Seguros

Con un escenario lleno de luces deslumbrantes y una audiencia eufórica, Paul McCartney ofreció un concierto memorable en el Estadio GNP Seguros en la Ciudad de México, parte de su exitoso Got Back Tour. A sus 82 años, el legendario músico británico demostró que su carisma y su pasión por la música siguen intactos, conquistando a más de 57,000 espectadores, quienes disfrutaron de un espectáculo lleno de clásicos y emotivos homenajes.

Un Inicio Cargado de Nostalgia

El espectáculo comenzó con dos de sus éxitos más emblemáticos, «A Hard Day’s Night» y «Junior’s Farm». McCartney, siempre cercano con su público, hizo esfuerzos por comunicarse en español, agradeciendo a los mexicanos y destacando lo especial de su regreso: «¡Hola, México! ¡Qué onda, chilangos! Gracias, esta noche voy a intentar hablar un poquito de español. Está padre estar aquí de nuevo. ¡Padrísimo!».

La velada se llenó de momentos únicos, como el deslumbrante espectáculo de luces con drones que iluminó el cielo durante la interpretación de «Let Me Roll It», creando figuras de colores que acompañaron las canciones en una fiesta visual. La atmósfera se volvió aún más especial cuando McCartney rindió homenaje a Jimi Hendrix, tocando la guitarra con la misma pasión que el legendario guitarrista.

Emotivos Homenajes y Conexión con el Público

El concierto estuvo repleto de momentos emotivos. McCartney dedicó varias canciones a sus amigos y compañeros de The Beatles, comenzando con «Something», dedicada a George Harrison, con imágenes del fallecido guitarrista en la pantalla. En otro emotivo momento, recordó a John Lennon con la interpretación de «Here Today» y «I’ve Got a Feeling», lo que elevó la conexión con el público a un nivel profundo.

El concierto no solo fue una celebración del pasado, sino también un recorrido por la historia de McCartney y The Beatles. Al recordar sus primeros días en Liverpool como The Quarry Men, interpretó «In Spite of All the Danger», la primera canción grabada por los miembros fundadores de lo que luego sería The Beatles. El público se unió al coro de «Love Me Do», una de las canciones que marcó el inicio de una de las bandas más grandes de todos los tiempos.

Los Clásicos y el Cierre Apoteósico

La parte final del concierto fue una celebración de sus éxitos más grandes. «Hey Jude», «Let It Be» y «The End» fueron algunas de las canciones que McCartney interpretó con toda su energía, cerrando la noche con una serie de himnos que siguen siendo icónicos para generaciones de fanáticos.

Tras un gran aplauso y gritos de «¡Olé, olé, olé, Sir Paul!», el músico regresó al escenario, ondeando una bandera de México, como un emotivo gesto de agradecimiento hacia su público. «¿Quieren más?», preguntó, y el estadio estalló de júbilo. La canción «I’ve Got A Feeling» dio paso a temas como «Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band» y «Helter Skelter», dejando a todos con la sensación de haber vivido una experiencia única e irrepetible.

Un Concierto Para la Historia

Más allá de su gran talento musical, Paul McCartney demostró una vez más por qué sigue siendo una de las figuras más influyentes en la historia de la música. Su conexión con el público mexicano fue palpable y, sin duda, este concierto quedará grabado en la memoria de todos los asistentes como una noche de música, nostalgia y magia.