Eddie Vedder revela un oscuro y extraño hábito que compartía con Chris Cornell

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Eddie Vedder reveló un oscuro y extraño hábito que compartía con Chris Cornell. El vocalista de Pearl Jam detalló la autenticidad que las líricias de las canciones Grunge tenían en ese entonces. No que a día de hoy no sean auténticas, pero en el momento de apogeo del género, según Vedder, se transmitían mensajes muy oscruos con las letras.

Las líricas del Grunge

En una entrevista con Lily Cornell Silver, hija de Chris, en el podcast «Mind Wide Open», el líder de Pearl Jam habló acerca de la oscuridad detrás de la música Grunge, y aclaró que ninguna banda del género buscaba «parecer» algo, sino que todos expresaban lo que realmente sentían. Dijo Vedder a la hija de Cornell:

«Tu papá y yo hablabamos de la música o el arte como lugares de liberación, algo llamado homeostasis. Es un lugar donde puedes llegar a ese nivel de sensación de energía o de mente despejada. Tu papá y la naturaleza, obviamente él tenía su música, y la acompañaba con letras oscuras. Las letras de Kurt Cobain también eran así, y las de Layne Stayley también».

No era gente que dijera: «Voy a fingir que escribo una canción oscura». Fue real para todos. Se convirtió en una cosa para burlarse de los grupos de grunge. Creo que la gente se lo tomó como algo personal. Dijeron: «No estábamos jodiendo». Probablemente por eso a la gente le gustó y pareció necesitarlo. «Este tipo está hablando por mí. Siento estas cosas’”.

Eddie Vedder sobre el oscuro y extraño hábito que compartía con Chris Cornell

Vedder reveló a Lily Cornell que compartía un oscuro y extraño hábito con el líder de Soundgarden:

«Tu papa solía recogerme a las 6 de la mañana. Todavía estaba oscuro, e íbamos a tomar un desayuno rápido, íbamos en coche a un lugar muy recóndito, y empezábamos a caminar hacia el medio de la nada mísma. Una loca selva tropical, la Península Olímpica. Ni siquiera podía imaginarme cómo sabía adónde iba».

«No creo que nadie más lo sepa. Tendrías que ser un trampero o algo así. Luego lo cronometró perfectamente, estuvimos ahí fuera durante mucho tiempo. Fuimos a nadar en las piscinas de hielo más frías y escalamos las montañas más verdes y rocosas. Las rocas comenzaron a desmoronarse. De repente, ambos éramos como dos imitadores de Spiderman colgados del costado de esta cosa, sin poder movernos. Simplemente atascados y 50 pies sobre el maldito suelo del valle».

«Empezamos a reírnos. Soundgarden acababan de terminar Badmotorfinger, uno de mis discos favoritos de todos los tiempos. Empezamos a reír casi hasta las lágrimas. La situación era tan ridícula. Nadie sabía dónde estábamos. Yo dije: «¿Le dijiste a Susan adónde íbamos?». Él dijo: «Oh dios, no lo hice». Creo que está en Detroit o en algún lugar .